jueves, 19 de julio de 2012

SAN AMBROSIO AUPERTO Monje


19 de julio 


SAN AMBROSIO AUPERTO 
Monje
(¿778? d. C.)

   San Ambrosio era un miembro distinguido de la corte de Pepino el Breve. Enviado por su soberano a una misión a Italia, tuvo ocasión de visitar el monasterio benedictino de San Vicente, en el ducado de Benevento. El espíritu y la observancia de los monjes le produjeron tal impresión, que ingresó al punto en la abadía. Después de su profesión y ordenación, predicó con gran éxito en la región; algunos de sus sermones se conservan todavía. Ambrosio vivió santamente, ignorado del mundo, consagrado sobre todo a escribir. Sus obras eran tan estimadas en la Edad Media, que su tratado sobre el conflicto de las virtudes y los vicios fue atribuido a San Ambrosio de Milán, a San Agustín, a San León IX y a San Isidoro de Sevilla, sucesivamente. Entre los escritos de Ambrosio se cuentan las vidas de los santos y un comentario del Apocalipsis. Dom Morin escribe a propósito de las obras del santo: "Por su ciencia y estilo, San Ambrosio constituye un fenómeno raro, casi un enigma, ya que no podemos dejar de preguntarnos dónde y cómo pudo acumular tantos datos, si tomarnos en cuenta la época y el sitio en los que vivió." Tampoco entre sus contemporáneos le faltaron admiradores: Carlomagno solía consultarle (pues Ambrosio había sido en una época su tutor) y el Papa Esteban IV le trataba como a un amigo. Ambrosio gozaba de simpatías también en su monasterio. Hacia el año 776, los monjes francos le eligieron abad; pero una coalición de monjes lombardos apoyaba a otro candidato llamado Poto. Enterado del asunto, el Papa Adriano I convocó a los dos rivales a Roma, pero San Ambrosio Autperto murió en el viaje. Fue sepultado en la basílica de San Pedro. Sus reliquias fueron trasladadas alrededor del año 1044, a la abadía que gobernó por tan corto espacio de tiempo.

   Existe una breve biografía latina; puede verse en las obras de Muratori y Mabillon y en Acta Sanctorum, julio, vol. IV. Ver sobre todo G. Morin, Revue Bénédictine, vol. XXVII (1910), pp. 204-212; y Morin, Etudes, Textes Découvertes (1913), pp. 23, 488, 494, 498, 506. Cf. J. Winandy, Ambroise Autpert, moine et théologien (1953).

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